El SIDA y la odontología
El sida es una
enfermedad causada por un virus VIH, que ocasiona la destrucción del
sistema inmunitario de la persona que la adquiere.
SIDA.- Síndrome
de inmunodeficiencia adquirida.
Inmuno: el
sistema inmune es el seguro o protección de nuestro organismo contra
las infecciones de todo tipo desde un catarro hasta un cáncer.
Deficiencia: el
sistema inmune no trabaja normalmente para proteger a la persona
infectada.
Adquirida: no es
una enfermedad heredada o genética, si no que se adquiere a través
de circunstancias específicas.
Existen tres
modos fundamentales de transmisión del VIH: la transmisión sexual;
la parenteral, por el uso compartido de agujas o jeringuillas,
transfusión sanguínea, etc., y la transmisión vertical o de la madre
al feto.
Algunos
efectos del SIDA
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Perdida de
peso rápida y repentinamente; el paciente llega a perder del 10
al 15 % de su peso en un mes.
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Debilidad
extrema, cansancio y fatiga crónica, sin causa aparente.
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Durante un
mes aproximadamente, fiebres de más de 39º, principalmente por
las noches, y diarrea liquidas o semilíquidas.
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Infecciones
en la piel, herpes o micosis en la boca y las encías, problemas
de gingivitis, ulceras o candidiasis.
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Infecciones
que afectan las vías respiratorias y causan tuberculosis o
neumonías.
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Hipersensibilidad en alguna parte del cuerpo, movimientos
involuntarios, convulsiones o, por el contrario, ausencia total
de sensibilidad e incapacidad de movimiento.
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Además, el
enfermo interpone mecanismos de defensa, negándose a aceptar
consciente e inconscientemente su condición de infectado por el
virus. Siente temor a enfrentarse a la inminencia de la
“muerte social”, después de la física, y la angustia llega hasta
el pánico.
Medidas para
prevenir el SIDA en consultorios y clínicas dentales.
El cuidado
dental rutinario involucra exposición a saliva y sangre, por lo
tanto la posibilidad de exposición a la infección por el VIH. El CDC
publica recomendaciones para el control de la infección en la
práctica dental. El personal que labora en el consultorio
odontológico debe adoptar los siguientes procedimientos con todos
los pacientes.
Procedimientos en el consultorio.
El odontólogo y
el personal auxiliar de odontología deben usar mandil, mascarilla y
lentes protectores, así como guantes durante todos los exámenes que
realice.
Los guantes
deben ser usados solo una vez, utilizando guantes nuevos con cada
paciente, estos guantes no deben ser lavados.
Esterilización
Debe utilizarse
la mayor cantidad de dispositivos desechables. Los autoclaves de
vapor, esterilizadores de vapor o las unidades de calor, pueden ser
utilizadas para esterilizar todas las piezas de mano y sus partes no
pueden ser esterilizadas en frío y deben ser esterilizadas con calor
de acuerdo a las instrucciones del fabricante. Deben lavarse los
instrumentos con agua por 20-30 segundos antes de ser sometidos a
esterilización. Cuando no es posible la esterilización, deben usarse
soluciones de glutaraldehido como desinfectante. Estas soluciones
deben cambiarse de acuerdo a las recomendaciones del fabricante para
mantener su efectividad.
Las superficies
en contacto con sangre o saliva deben ser desinfectadas con
soluciones diluidas de hipoclorito de sodio (1/10 a 1/100),
dependiendo de la cantidad de material presente en la superficie y
con soluciones yodadas. Las aplicaciones repetidas de soluciones
cloradas pueden dañar algunas superficies. El personal auxiliar no
debe manejar agujas y solo deben colocarlas en los contenedores
especiales para objetos punzo-cortantes. Todo el material de
desperdicio deberá ser colocado en bolsas de plástico, las cuales se
manejaran de acuerdo a las leyes locales.
También el
ambiente de los consultorios debería estar acondicionado con equipos
que purifiquen el aire.
Impresiones
Las impresiones
deben ser desinfectadas en soluciones yodadas antes que el modelo
sea vertido. La mayor parte de materiales de impresión toleran este
procedimiento.
Tratamiento
dental
El riesgo de
contraer o diseminar la infección por el VIH a través del
tratamiento dental es muy bajo. La negativa de ofrecer tratamiento
dental a los portadores conocidos de la infección por el VIH sólo
alienta a los pacientes a mentir acerca de su historial médico.
Todos los pacientes, si son portadores asintomático de la infección
por el VIH o sintomáticos, deben tener acceso al tratamiento dental.