DISEÑO PARA UNA PRÓTESIS DENTAL TOTAL
Para el diseño en
caso de prótesis totales, para edentes totales tenemos que considerar la forma y
estructura del maxilar respectivo. En algunos casos tenemos un maxilar de
características regulares, donde el perfil del reborde residual es uniforme en
toda su extensión, en estos casos se facilita la toma de la impresión y demás
pasos siguientes, incluso la adaptación de la prótesis resulta mas fácil por
parte del profesional y sin molestias para el paciente.
Falta de observar si
este maxilar de aspecto regular presenta las inserciones altas o bajas de manera
que faciliten un diseño con fondo de surco más corto o mas largo que permita una
mayor o menor área protésica, la misma que determina muchas veces la mayor o
menor estabilidad de la prótesis.
Cuando las
inserciones son bajas y los frenillos también, se reduce el fondo de surco y el
diseño resulta poco profundo, causa suficiente para desestabilizar la prótesis,
especialmente si los rebordes residuales son de poca altura que reducen la
extensión del área protésica apta para recibir y alojar a la prótesis con éxito.
Los maxilares de
conformación irregular son menos receptibles que los regulares. En el maxilar
superior tenemos que considerar la profundidad del paladar y la extensión
anteroposterior que limita la porción dura de la blanda del paladar, línea que
se conoce como la línea del post daming, o línea del (A). es muy importante
conocer exactamente esta línea, porque tanto el diseño como la prótesis misma no
deben rebasar ese limite por cuanto al hacerlo molesta y produce arcadas que en
algunos casos impiden su uso por nauseas.
También hay que
tomar muy en cuenta la presencia de los torus palatinos y la presencia de
engrosamiento de la tuberosidad del maxilar superior, que en muchos casos
lleguen a contactar con la papila piriforme del maxilar inferior, no ofreciendo
espacio suficiente para colocar ni siquiera la base acrílica, peor una pieza
molar. En estos casos se hace indispensable la cirugía para eliminar todo el
tejido óseo que sea necesario. En estas condiciones queda el maxilar apto para
recibir la prótesis.